martes, 22 de marzo de 2016

Proceso

La adaptación a un nuevo hábitat es compleja. Todo es nuevo, todo es raro, nunca sabes a donde estas. 
Mi pregunta constante es: Si me pierdo (en el lugar que sea) Como me vuelvo? 
Hay mas preguntas dando vueltas siempre. 

Decidí dejar de callarme, pero aprendi que no tengo que preguntar si no estoy dispuesta a escuchar la respuesta que deseo.

Durante mi primer año en esta nueva vida callé muchas cosas y pregunté sin querer escuchar respuestas. Fue muy dificil. Me lastimé. 
Ya no omito palabras. Si me preguntan respondo. A veces sé que puedo lastimar con mis respuestas. 
Sin haber preguntado me dijeron palabras hirientes y nunca me pidieron perdón porque esa era su verdad y no tenían que ocultarla. 

Ahora soy yo quien no oculta la verdad. Sera momento de que los demas aprendan a no preguntar.